©Jorge M. González
En la historia de Jimmie Angel se entrelazan la verdad y la leyenda. Sus exploraciones más importantes las hizo en la Gran Sabana, uno de los lugares más impresionantes del planeta. Jimmie estaba convencido que encontraría un “río de oro” sobre la montaña en la cual solo halló un tesoro para ser compartido: un enorme salto que vería por vez primera el 18 de noviembre de 1933 y que desde 1939 lleva oficialmente su nombre: Salto Angel. Ese mismo que se desprende de la mítica montaña conocida como Auyántepui, la “montaña del diablo.”
En la historia de Jimmie Angel se entrelazan la verdad y la leyenda. Sus exploraciones más importantes las hizo en la Gran Sabana, uno de los lugares más impresionantes del planeta. Jimmie estaba convencido que encontraría un “río de oro” sobre la montaña en la cual solo halló un tesoro para ser compartido: un enorme salto que vería por vez primera el 18 de noviembre de 1933 y que desde 1939 lleva oficialmente su nombre: Salto Angel. Ese mismo que se desprende de la mítica montaña conocida como Auyántepui, la “montaña del diablo.”
Dibujo original: Jan-Willem de Vries (Truth or Dare: The Jimmie Angel Story, 2011)